Un interesante y entretenido taller online sobre huertos en casa se llevó a cabo la semana pasada para todos los ex alumnos de la PUCV que estuvieran interesados en participar de forma gratuita. La instancia estuvo organizada por la Red Alumni PUCV y fue facilitada por nuestra ex alumna Romina Lobe, fundadora del espacio virtual Clorofilas.cl.

En el taller, Romina dejó muy en claro que no es necesario tener grandes extensiones de terreno para tener un huerto propio, con verduras y hierbas aromáticas comestibles que podamos disfrutar en forma periódica. Más bien, se necesitan muchas ganas, un poco de organización y los conocimientos adecuados para que nuestro espacio verde en casa sea todo un éxito.

En la actividad a la que asistieron más de 30 ex alumnos PUCV, la ingeniera agrónoma entregó conceptos básicos sobre el suelo, la materia orgánica e inorgánica, además de todos los materiales e implementos necesarios para empezar una huerta. También enseñó sobre los procedimientos para siembra de almácigos, los errores frecuentes que se comenten y dio muchos consejos sobre manejo de plagas y enfermedades que podrían afectar a nuestra huerta.

"El mensaje que quiero recalcar es que cualquier persona puede tener un huerto en el lugar donde viva. No importa si tiene casa con patio. Si vive en una parcela mucho mejor, pero los que vivimos en departamento también podemos tener nuestro huerto. A veces basta con tener una jardinera en la cocina con hierbas aromáticas que uno ocupe para cocinar como orégano, tomillo y qué más rico que tenerlas ahí frescas en la misma planta e irlas sacando en las medidas que las necesitamos para la cocinar. O también una plantita de ají y poder ir sacándolos para las ensañadas. Súper rico y no necesita eso mucho espacio o muchos cuidados", comentó Romina.

Otro mensaje que se intentó transmitir es que es posible dar el salto de tener plantas de interior y cambiarnos a plantas comestibles en esas mismas macetas. "En vez de estar manteniendo pasto o plantas que son de alto requerimiento hídrico, si ya vamos a hacer esa inversión en agua y abono, lo mejor es tener plantas comestibles en con las que podemos tener una experiencia más gratificante, bajamos nuestra huella de carbono y además, tenemos casi una terapia con el huerto", comentó la profesional.

Finalmente, otro mensaje central en torno a la actividad fue el de comprender que cuando la gente decida tener un huerto no solo debe pensar en la planta o en la hortaliza que se va a comer, sino siempre debe pesar en acompañarla con color con olor.

"Nuestras hortalizas van a ser el cultivo clave pero también se deben acompañar con flores y con hierbas aromáticas porque debemos aspirar a tener un mini ecosistema equilibrado. El objetivo de esto es tener biodiversidad, porque esas plantas también van a atraer insectos que son controladores biológicos de los bichitos que son plagas, van a llamar a polinizadores y emitirán sustancias que son repelentes de otros insectos. Entonces buscamos un control orgánico y un manejo ecológico en el huerto. Porque si lo pensamos llevar con uso de químicos e insecticidas, no veo la ventaja de tener un huerto en casa. La gracia es, efectivamente, poder manejarlo de una forma más ecológica y consumir todo con suma