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Decana de Facultad Eclesiástica de Teología realiza profesión de fe en el contexto de la inauguración del año académico de la PUCV

La Decana de la Facultad Eclesiástica de Teología, Dra. Loreto Moya Marchant cumplió con lo estipulado por la Santa Sede en lo referido a que, una vez asumido el cargo, debe realizar la Profesión de fe y juramento de fidelidad al Magisterio de la Iglesia.

Loreto Moya Marchant, es Doctora en Teología por la Universidad Católica de Lovaina, Bélgica. Su área de especialización es la teología práctica, desde ella se ha dedicado a la tarea académica dentro de la Facultad Eclesiástica de Teología de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso, donde juró recientemente como Decana durante la ceremonia de Inauguración del Año Académico de esta Casa de Estudios. Su nombramiento, además, es histórico, pues se trata de la primera vez que una mujer asume este cargo en el país.

Al respecto, la profesora expresó su alegría por haber sido elegida por sus propios colegas como candidata para la terna: “significa que hay confianza. No es un proyecto personal, sino que es de toda la Facultad”. Asimismo, agradeció la confianza del Gran Canciller y Obispo de Valparaíso Mons. Jorge Vega por su nombramiento.

“Es muy significativo que se haya nombrado a una mujer como Decana de una Facultad Eclesiástica y, al mismo tiempo, es una responsabilidad enorme. Pero tengo la tranquilidad de que, aunque la Decana es la cara visible para muchas cosas, hay un equipo detrás y tengo la seguridad del éxito de nuestra gestión”, agregó.

La nueva Decana también se refirió a los desafíos que enfrentará en su cargo. La Facultad de Teología está, en primer lugar, al servicio de la Diócesis de Valparaíso y en ese contexto destacó la implementación del Magíster en Teología como el objetivo principal para los próximos tres años. “Ya hemos cumplido diez años como Facultad, existe un recorrido en su planta académica, por lo que consideramos que ya contamos con la suficiente madurez para tener una oferta en Chile y en el extranjero de una teología que nace en una región, que quiere ser contextual y permitir a hombres y mujeres reflexionar sobre su fe y sus prácticas religiosas”, concluyó.