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Investigadores de 22 países se dieron cita en nuestra casa de estudios para participar en el Primer Congreso Internacional de Movimiento Ocular (LACEM por sus siglas en inglés) realizado en Latinoamérica, posicionando a la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso como referente en el empleo de eye-tracking para analizar el procesamiento del lenguaje y la cognición.
El evento –versión latinoamericana del prestigioso congreso europeo European Conference on Eye-Movements (ECEM) y organizado por el Instituto de Literatura y Ciencias del Lenguaje (ILCL) de la Universidad– reunió a las y los principales exponentes nacionales e internacionales en procesamiento del lenguaje y aprendizaje por medio del registro de movimientos oculares.
Según explicó Romualdo Ibáñez, académico del ILCL y coordinador científico del Laboratorio de Lenguaje y Cognición de la PUCV, esta actividad representa un hito ya que es la primera vez que se realiza fuera de Europa.
“Hemos conversado con colegas de Brasil, Argentina, Paraguay y Uruguay, quienes están interesados en dar continuidad a esta iniciativa en América Latina, ya que faltaba una instancia de este tipo. Más que un evento puntual, lo que buscamos es impulsar la conformación de una comunidad de investigación en el área y creemos que lo estamos logrando al convocar a investigadores de 22 países y reunir más de 80 ponencias en el congreso”, manifestó Ibáñez.
Múltiples aplicaciones
Como técnica de estudio, el eye-tracking se puede utilizar en neurociencia, psicología, educación y lingüística, que son las áreas más comunes. “Gracias a este primer LACEM quedó en evidencia que el eye tracking también se utiliza en áreas como la ingeniería en alimentos. Por ejemplo, vimos una presentación sobre cómo el foco ocular permite identificar las preferencias alimentarias de las personas. Asimismo, se aplica en marketing y en otras líneas de investigación vinculadas a la ejecución musical. Esta diversidad de usos abre múltiples proyecciones de investigación, lo que lo hace aún más atractivo”, detalló Romualdo Ibáñez.
Para el investigador de la Universidad Antonio Nebrija de Madrid, Berhard Angele, quien es experto en procesamiento parafoveal de los textos, una de las ventajas de este primer LACEM es que ha logrado reunir a investigadores que antes no se conocían, propiciando la formación de redes colaborativas y revelando un alto nivel científico en Chile, Argentina y Brasil.
“El estudio de los movimientos oculares en Chile, en particular en la PUCV, es de primer nivel, por lo que estoy muy contento de estar aquí y conocer el trabajo de mis colegas. Además, es destacable que se realice investigación en español y portugués, idiomas que han sido poco analizados con esta técnica. La mayor parte de los estudios se ha desarrollado en inglés —y en menor medida en alemán y francés—, por lo que resulta muy positivo que esto esté cambiando”, destacó Angele.
Lenguaje y cognición
El laboratorio de Lenguaje y Cognición de la PUCV, creado en 2016, se ha convertido en un espacio de investigación de referencia internacional que cuenta con destacadas colaboraciones con renombrados centros a nivel internacional. Entre estas alianzas, destaca el prestigioso Laboratorio de Eye Tracking de la Universidad de Turku, en Finlandia, con quienes han desarrollado investigaciones conjuntas sobre procesamiento de lenguaje figurado.
Asimismo, junto al Laboratorio de Eye-Tracking in Reading Research de la Universidad McMaster, en Canadá, la PUCV participó en el Proyecto MECO (Multilingual Eye-tracking Corpus), una iniciativa pionera que analiza patrones de lectura en múltiples idiomas.
“Estas alianzas estratégicas no solo han enriquecido nuestra investigación, sino que han posicionado a nuestro laboratorio como un nodo importante en la red mundial de estudios sobre el procesamiento y la adquisición del lenguaje”, agregó Ibáñez.
La primera versión del LACEM, realizado en la PUCV, reunió a expertos de países como: Japón, Polonia, Rusia, Suiza, España, Puerto Rico, Brasil, Argentina, Italia, Alemania, Francia, Finlandia, Estados Unidos, Reino Unido, Canadá y Chile, entre otros.
Por Érika Schubert
Dirección de Comunicación Estratégica