“Bajo la estrella del sur” es uno de los versos que integran un vals porteño tradicional de la celebración de Navidad. La pieza musical rememora una antigua costumbre de regalar un ramillete de albahaca y claveles, un regalo modesto, pero que acompañado de golosinas y frutas de estación reflejaban bondad y deseaban abundancia.
Hoy, Bajo la Estrella del Sur es el título de un recital que preparó el Conjunto Folklórico de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso y que revivirá la tradición del Saludo al Pesebre, una de las grandes celebraciones que en el pasado recreaba esta histórica agrupación de la mano de Margot Loyola y Osvaldo Cádiz.
Religiosidad y espiritualidad nacional que reúne tres líneas culturales, según explica Jimi Molina, director artístico de la agrupación: una nacional indígena, otra española católica y también, aunque específico de ciertos lugares, una afrodescendiente que se mezcla en algunas de las danzas y canciones que el conjunto presentará durante la jornada del sábado 11 de diciembre a las 19:00 horas en uno de los patios del colegio Rubén Castro de Viña del Mar (Avenida El Bosque 1388, sector Santa Inés).
Un viaje patrimonial e histórico que, a través de la música y la danza, busca recuperar tradiciones navideñas celebradas en distintos rincones de Chile. Expresiones que rememoran las comparsas de gitanos y bailes de pastores en el norte; cantos a lo divino, lanchas (un tipo de danza característica de Petorca asociada a los bailes chinos), tonadas, esquinazos, cuecas, jotas típicas de la zona centro y, más al sur, villancicos chilotes y un pasodoble al niño Dios. Estas son algunas de las sorpresas que el conjunto preparó para este año. Por eso, Molina lo define como “un recorrido de expresiones y celebraciones a lo largo de nuestro país que invitan a conocer esta diversidad cultural respecto a la Navidad”.
“Intentamos recrear tal cual lo que sucede en la vida real cuando las comunidades celebran”, sostiene Molina. “Buscamos salvaguardar el patrimonio cultural, para que la gente lo conozca, porque en la medida que conozco algo, puedo protegerlo. Queremos mostrar esta tremenda riqueza cultural que existe en el país”, indica el director artístico.
Una víspera navideña patrimonial e histórica que no solo es un montaje estético coreográfico, sino también de artes escénicas que “busca contar una historia y que posee una base de investigación que le da sustento”, concluye Molina.
Con este recital -para el que se solicitará Pase de Movilidad- el colegio Rubén Castro abre sus puertas a la comunidad, concluyendo así el programa cultural que este año vinculó al establecimiento con la Universidad a través de talleres de cine, escritura, temas patrimoniales y tradiciones dirigidos a estudiantes y profesores.