23.12.2019
Como es tradicional, la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso congregó a la comunidad universitaria en torno a la Liturgia de Navidad y el Saludo al Pesebre en la Capilla de Casa Central.
En la oportunidad, monseñor Pedro Ossandón, Administrador Apostólico de Valparaíso y Pro Gran Canciller PUCV, indicó que “el Niño Dios nos invita a hacer silencio de profundidad, contemplativo, a renovar y a cultivar nuestra vida interior”.
En este plano, monseñor Ossandón agregó que “en estos tiempos, a propósito de la crisis del país, hemos leído como nunca análisis de situación, críticos, políticos, culturales, sociales, hemos escuchado opiniones, debates públicos. Nosotros mismos hemos participado del diálogo (…) Esta universidad ha sido un ejemplo, invitó al diálogo, a escucharnos unos a otros. Hoy en Navidad queremos escuchar lo que Dios nos quiere decir”.
“El llamado a austeridad que nos hace esta crisis del país nos viene bien, para que la Navidad no sea farándula, no sea algo superficial donde prima el consumismo que humilla y que es tan violento también, sobre todo a las personas que sufren la desigualdad, los más pobres”, añadió el Pro Gran Canciller de la PUCV.
Asimismo, hizo un llamado a pedir la gracia de la humildad: “tiempo para pedir perdón por todas las veces que no escuchamos, cuando nuestro corazón está lleno de soberbia, de prepotencia, de vanidad, de individualismo, de egoísmo”.
Al finalizar, el Conjunto Folclórico dio vida al Saludo al Pesebre, oportunidad en la que interpretó una serie de villancicos. Posteriormente, los asistentes compartieron en torno a un chocolate caliente en la Sala Multipropósito de Casa Central.
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