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Compatibilizar los estudios con una completa vida universitaria

24.11.2023

Emanuel Gutiérrez es alumno de quinto año de Derecho PUCV -porteño y ex alumno del colegio Carlos Cousiño-  fue el ganador de un concurso de cuentos de la Escuela, afición que comparte con otros hobbies, además de los estudios por supuesto. “La vida universitaria no es solo estudio, es conocer gente de otras realidades o regiones, formar lazos. La universidad no puede ser solo llegar a clases, que el profesor te enseñe e irte a la casa a estudiar, sino que es también conversar con tus compañeros, tener momentos de distensión. Eso lo he podido vivir en Derecho PUCV plenamente”, relata.

El estudiante explica que el regreso a la presencialidad fue una excelente oportunidad para conocer más compañeros de la Escuela, tener momentos de distensión, como crear campeonatos de fútbol o concursos artísticos.  

Emanuel es consciente de que la carrera de Derecho es exigente, pero explica que con rigurosidad y organización, se puede sacar adelante, y él ha contado con tiempos libres para leer, escribir, jugar fútbol, ver un buen documental o pasear al aire libre, especialmente por Valparaíso porque le interesa mucho la historia del Puerto y piensa en escribir sobre ella en el futuro. Además, tiene un fuerte interés por la historia, entonces busca mezclar sus relatos con contextos históricos.

“A veces me concentro mucho en los estudios, pero otras veces siento que necesito espacio para otras cosas. Muchas veces pienso que tengo tiempo para estudiar, pero me siento agotado y descanso un poco, veo un documental o salgo, para después sentir realmente que estoy aprendiendo, y no leer por leer”.

Su afición por la escritura comenzó de niño porque su familia siempre le inculcó la lectura: “he sentido desde muy pequeño que tengo esa noción de la fantasía, de imaginar cosas y con eso he escrito desde chico. La primera historia que hice fue a los 9 años, tuve que presentar mi cuento y percibí que a todos les gustaba, mis compañeros se sentían identificados con ese relato”. 

Emanuel cuenta que en su teléfono tiene un listado de asuntos sobre los que le gustaría escribir en el futuro, a pesar de que cuando intenta crear una historia, no siempre le resulta bien porque al comenzar a escribir, hay ideas que no se desarrollan bien.

A pesar de su interés por la escritura, nunca pensó en estudiar algo ligado directamente con eso, sino que siempre quiso estudiar derecho. “Veo esto como un hobby para desestresarme, entrar a un mundo distinto, meterme en algo distinto para escapar de la realidad”, reflexiona. 

Cuando se presentó la oportunidad del concurso de cuentos, no estaba seguro de participar, pero varios compañeros que habían leído algunos escritos de él, lo convencieron. Al ser la temática principal la universidad, sus problemáticas y cómo mejorar algunos aspectos, terminó por convencerse y enviar un cuento. Ganó el primer lugar.

“Ese cuento tenía partes mías y algunas cosas que mis compañeros han vivido, entonces era con sentimiento especial. Cuando lo leyeron les gustó mucho. Sentí que presentaba algo bueno, con sentido, no algo solo por presentar. Para mí lo importante no era ganar, sino que era entregar esa mirada distinta al mundo estudiantil porque el mismo cuento tiene el sentido de relatar la importancia de encontrar la amistad dentro de la carrera. Tiene ese cariz de que las personas que uno conoce acá, pueden durar toda la vida. Eso es lo que quise plasmar. Porque he conocido acá grandes amigos” puntualiza. 

Emanuel finaliza con un mensaje a las futuras generaciones: “que se atrevan, que nunca piensen que un hobby es una pérdida de tiempo y por eso lo dejen. Es importante estudiar, pero también despejarse y así luego volver mejor al estudio”.

Accede al cuento aquí.

Facultad y Escuela de Derecho PUCV