Jeanette Bruna Jara, Alumni Derecho PUCV
Experta en derecho urbanístico: “El Derecho hoy va más allá del escritorio y la litigación, también exige gestión y colaboración”

19.11.2025
Ingresó a estudiar Derecho en la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso en 1996. Aunque es oriunda de la Región de Valparaíso, terminó la enseñanza media en Copiapó en donde fue presidenta del centro de alumnos, pero siempre con ansias de regresar y estudiar derecho que era su vocación. “Siempre quise poder hacer algo por la niñez, por mejorar las ciudades y la vida para ellos. Por eso cuando quedé en la PUCV con una beca que pagaba el año, sentí que el destino me decía que este era el camino”.
“Mi madre me motivó a llegar a la Universidad, y aunque le generaba incertidumbre que me volviera a vivir sola a la V° Región, decidí trabajar para costear mi matrícula y así emprendí vuelo y retorné a mi querido Valparaíso, siendo la primera generación de mi familia en terminar la universidad”, recuerda.
El primer año fue tan exigente y desafiante como lo había imaginado. “Pasaba todo el día estudiando en la Escuela, me hice amiga de secretarias, estafetas, de los funcionarios de la biblioteca de la Escuela, que fue mi primer trabajo acá. Era una etapa muy demandante”. Destaca que al año siguiente la Escuela abrió el taller de teatro. “Ingresé e hice un papel estelar en la primera obra. Fue una experiencia maravillosa. Nos abrió una puerta hacia las artes y me convenció de que la PUCV era mi alma mater”.
Durante sus años de estudiante paralelamente, trabajó en diversos oficios para poder mantenerse, junto a un grupo de compañeras que atravesaban la misma situación: “a veces apenas alcanzábamos la asistencia mínima, ¡pero pudimos!” Sus primeros trabajos en el mundo jurídico llegaron gracias a la propia red de la Escuela. Por eso siempre ha considerado la Escuela como su segundo hogar: “la pisé un día y nunca más me fui, ahí trabajé, estudié pregrado, hice universidad, hice mis postítulos y mi posgrado como Magister en Derecho Administrativo mención ordenamiento territorial y derecho medioambiental, y ahí también contraje matrimonio religioso en la Capilla de la Universidad, mi lugar de paz e introspección”.

Entre los docentes que la marcaron, recuerda con especial admiración a don Alejandro Guzmán. “Era como ver pasar a Aristóteles por los pasillos, lo admiraba profundamente”. También menciona a Pedro Pierry, con quien cursó Derecho Administrativo, área que finalmente sería el eje de su carrera. “La rigurosidad de la Escuela me preparó para el mundo profesional. Salí con las herramientas necesarias para enfrentar lo que fuera”.
En 2013 fundó la ONG Abogadas Pro Chile, un voluntariado de abogadas dedicadas a proponer políticas públicas y legislativas para defender a mujeres y la niñez en situación de vulnerabilidad, alcanzando relevancia a nivel nacional, con casos como el cierre de los centros del SENAME, condena a pederastas o en el caso de las mujeres funcionarias de la Armada espiadas por sus compañeros cuando instalaron cámaras en los barcos, un proceso que permitió sentar las bases para mejorar las condiciones de las mujeres en la Armada.
El 2014 comenzó a trabajar en la Municipalidad de Valparaíso que fue el giro definitivo en su carrera hacia el derecho administrativo y urbanístico, llegando a ser la primera mujer directora jurídica. “Fue una gran experiencia, sobre todo porque pude abrir puertas a otras mujeres y asumir temas complejos en la defensa de permisos de construcción desde los inicios del boom de la permisología ”, recuerda.
Desde 2017 ejerce en forma independiente y se ha especializado en derecho urbanístico, área en la que ha ganado reconocimiento regional y nacional. “El profesor Eduardo Cordero fue clave en este camino tanto por su conocimiento como por la invitación a ser profesora del diplomado en Derecho Urbanístico de la PUCV en el que primero había sido alumna, gesto que agradezco profundamente”. Hoy sigue como profesora en el diplomado y ramo optativo del rubro, y también en el Magíster de Derecho Administrativo de la Escuela, del que fue parte en la primera generación graduada. También imparte clases de derecho urbanístico en posgrado de la Universidad San Sebastián y la Universidad Central, además de ser conferencista invitada a seminarios desde la academia, el mundo público y privado, y el gremial. Además, como académica, el 2023 fue invitada a formar parte de la mesa intersectorial de agilización de permisos de construcción liderada por el Ministerio de Vivienda y Urbanismo.
Ese impulso la llevó a fundar Inteligencia Urbana Consultores, junto a su marido ingeniero comercial, innovando en un nuevo formato de firma legal en que mantiene el sello jurídico, pero incorpora la interdisciplinariedad dedicada a la asesoría jurídica y judicial, pero también a la gestión en proyectos inmobiliarios y urbanos. “Comprendí la necesidad de tender puentes entre el mundo público y privado, he estado en ambos lados de la mesa, y para abordar los temas de permisología no bastaba con ser abogada litigante. Se necesitaba incorporar una visión integral e interdisciplinaria. Esa es nuestra propuesta de valor, trabajando desde el inicio de los proyectos, blindándolos bajo cumplimiento normativo, relacionándolos con la comunidad y colaborando en despejar los problemas interpretativos para bajar la conflictividad desde su inicio y facilitar las aprobaciones intersectoriales”.
Entre los casos emblemáticos recientes en que ha participado destaca la recuperación de emblemáticos permisos de construcción en tribunales, sus informes a la comisión investigadora de la Cámara de Diputadas y Diputados en el caso de los socavones en Viña del Mar, o su asesoría para solucionar la problemática de las tomas de terrenos, cuya estrategia jurídica logró la demolición de las construcciones ilegales en el terreno tomado a la familia Correa, que sentó un precedente país: “logramos que las autoridades del MINVU se hicieran cargo y que el Estado asumiera su rol en la materia demostrando que no se trata sólo de un problema entre privados”.
Su labor ha sido reconocida públicamente con el Premio a Mujeres Destacadas de la Región (2017, Región F), un hito que valora especialmente. “Estos reconocimientos abren ventanas para que más mujeres se atrevan y se sigan abriendo más espacios”. Por eso además hoy forma parte de agrupaciones de abogadas y de mujeres en el mundo inmobiliario a nivel nacional. “Hoy el Derecho no se reduce a investigar, escribir o litigar. Implica comprensión y manejo de procesos humanos y organizacionales, y capacidad de comunicación asertiva, en donde la gestión con autoridades y ante la prensa pasaron a formar parte de la labor profesional”.
Así, convertida en un referente a nivel nacional en la materia, con una visión de compromiso social y vocación de servicio, reflexiona sobre lo aprendido para dejar un mensaje a las actuales y futuras generaciones de estudiantes, de profesores y de empleadores: “debemos seguir relevando como sociedad que el esfuerzo y la persistencia para lograr las metas pese a las dificultades, trabajar y estudiar, son en sí mismo un valor a destacar, porque más allá de las notas, fuera de la universidad el esfuerzo y compromiso iguala a todos los profesionales y son la receta para cumplir los sueños, ser un profesional de excelencia y contribuir a una sociedad más justa y equitativa”.

Facultad y Escuela de Derecho PUCV