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Mg. Carmen Márquez: Situar la docencia en el territorio

A través de la metodología Aprendizaje y Servicio, la académica de nuestra Facultad motiva a estudiantes y vecinos a trabajar de forma conjunta en la solución de problemáticas que afecten el entorno de la Universidad.

Magíster y licenciada en Educación, profesora de Religión y Moral, bachiller en Ciencias Religiosas y licenciada en Filosofía, la académica de la Facultad Eclesiástica de Teología PUCV Carmen Márquez es uno de los principales referentes de la Universidad en torno a la metodología Aprendizaje y Servicio (A+S) aplicada en el marco del curso de formación fundamental Ética Cristiana.

“Veía que los cursos eran muy teóricos, con poca bajada al territorio y decidimos comenzar con proyectos solidarios, donde los estudiantes pudieran observar la realidad desde otra perspectiva. Muchas veces salieron ideas para los perritos callejeros, por ejemplo, pero al lado había personas en situación de pobreza que eran invisibilizadas. Ahí nos dimos cuenta que había que redimensionar la mirada”, explica Carmen.

Motivados por suscitar estos procesos en un aula multidisciplinar y heterogénea -en los cursos de la asignatura Ética Cristiana participan estudiantes de diferentes edades y carreras-, en 2015 comenzaron a pulir esta metodología junto al recordado profesor Jorge Aros, con quien también postularon a proyectos de investigación e innovación dentro de la Universidad. 

En la actualidad, el trabajo de Aprendizaje y Servicio ha traído impactos directos en los habitantes de diferentes cerros de Valparaíso, como Larraín, Cordillera y Santo Domingo, de la mano de proyectos interdisciplinarios desarrollados en la cátedra de Ética Cristiana, donde estudiantes y vecinos trabajan de manera conjunta para impactar positivamente en su entorno. “La gente se siente escuchada, son parte fundamental en la elaboración de la solución a sus necesidades y que te digan que los problemas de su día a día le importan a alguien es sumamente motivante y potente”, puntualiza la académica.

A su vez, Márquez destaca que la metodología A+S también puede ser llevada al plano virtual, apuntando a resolver de forma colectiva problemáticas online de acuerdo a las necesidades del socio comunitario; por ejemplo, alfabetización digital o cursos de excel: “Tiene que ser un aporte concreto a la comunidad, diferente a un clásico ejercicio de aula. Al poner en práctica temas valóricos, los estudiantes ponen en juego lo que han aprendido o  analizado, sus experiencias, ideas, prejuicios y formas de pensar, reconociendo además que cada cerro tiene su propia realidad”.

VIDA ACADÉMICA

Carmen Márquez también forma parte de la Cátedra de Doctrina Social de la Iglesia, donde junto a los académicos Juan Pablo Faúndez, Kreti Sanhueza, Fernando Sandoval y Tania Squizzatto se reúnen todos los miércoles para analizar textos de la disciplina y organizar dos coloquios anuales, donde también participan profesores de otras unidades académicas.

Además, dentro de las actividades de Márquez en la Universidad, destaca su participación en el Observatorio de Responsabilidad Social, una instancia con profesores de distintas Escuelas que busca promover la formación de profesionales que reflexionen sobre su propio quehacer en el servicio a la comunidad. A su vez, el Observatorio está fuertemente conectado con ODUCAL, Organización de Universidades Católicas de Latinoamérica y el Caribe; donde en su área de responsabilidad social desarrollan conversatorios mensuales con académicos de diferentes países de la región. 

En esta misma línea, este año la profesora está cursando el Diplomado “Formación en Responsabilidad Social”, impartido por nuestra Universidad y que reúne a 32 instituciones internacionales, en el marco de la colaboración junto a la Organización de las Universidades Católicas de América Latina y el Caribe. “Es un espacio de reflexión muy interesante, que permite compartir reflexiones e inquietudes con académicos de distintos países”, puntualiza Carmen.