21.02.2018
A la hora de fortalecer el liderazgo escolar en Chile, los esfuerzos realizados en las últimas décadas se han enfocado mayoritariamente en la figura del director y en la enseñanza básica. La brecha existente para averiguar qué ocurre con otros tipos de liderazgo al interior de los establecimientos, en el contexto de la enseñanza secundaria, es el marco en el que se desarrollará el proyecto que investigadores de LIDERES EDUCATIVOS se adjudicaron en el concurso Fondecyt regular 2018.
“La contribución del liderazgo pedagógico de los jefes de departamentos disciplinarios en los procesos de mejora escolar en educación secundaria” es el nombre de la iniciativa del Centro, liderada por su directora, Carmen Montecinos, y que será realizada por un equipo que también componen Mónica Cortez, Juan Pablo Valenzuela, Xavier Vanni y Óscar Maureira.
Como explica Montecinos, “la investigación internacional ha concluido que más allá de la función de los directores(as), el liderazgo docente es clave en la mejora escolar. En ese sentido, los jefes de departamentos cumplen un rol estratégico, pues median entre el director y la planta docente, promueven el desarrollo profesional de sus pares y son una pieza clave a la hora de fortalecer el trabajo en red con otras escuelas o liceos, que es precisamente uno de los focos centrales de nuestro Centro”.
Esta investigación es pionera al proponerse esclarecer cuáles son efectivamente las tareas de liderazgo pedagógico de los jefes de departamento en Chile y cómo contribuyen al mejoramiento de la educación secundaria, arrojando luces sobre las condiciones organizacionales que promueven o inhiben esta contribución. Todos ellos campos prácticamente inexplorados en Chile.
La iniciativa se llevará a cabo en establecimientos que imparten educación secundaria que presenten trayectorias de mejoramiento simétricas y asimétricas por disciplinas (lenguaje y matemática). “Nos interesa indagar en la distribución del liderazgo pedagógico, caracterizando sus estructuras formales y prácticas, y también dilucidar el modo en que se relaciona el rol de los jefes de departamento con la cultura escolar de cada escuela o liceo”, añade Carmen Montecinos.
Cabe destacar que estos resultados podrán orientar la política para el fortalecimiento del liderazgo escolar contextualizando a la educación secundaria y programas de formación de líderes escolares medios para sostener procesos de mejora en este nivel.
Por Diego Trujillo
LIDERES EDUCATIVOS
